Giulietta Masina, la musa de los espíritus

El pasado mes de febrero, Martin Scorsese publicó un ensayo alabando la figura de Federico Fellini, en el que hablaba de su infinito valor como cineasta y de cómo se ha negligido la expansión y promoción de su cine a todos los niveles desde que falleciera en octubre de 1993. Scorsese no escatimaba en halagos, en un ensayo largo en el que repasaba la carrera del director italiano y la poblaba de anécdotas personales su propia relación con películas como 8 y 1/2 o La dolce vita.

Cartografía de un día infinito

Groundhog day, o Atrapado en el tiempo, fue una revelación. Aun a día de hoy sigue siendo una película divertida, entrañable, y uno de los máximos exponentes de la vis cómica de Bill Murray, como alguien gracioso pero profundamente deprimido (un papel que no ha dejado de interpretar desde entonces). Su marca en la cultura popular es indeleble, y cada vez que surge una nueva película sobre bucles temporales, es el estándar al que hay que llegar. En lo que llevamos de año, dos películas han aterrizado en plataformas en España que comparten el uso de los bucles temporales, pero que lo hacen de forma diametralmente opuesta: Palm Springs y The map of tiny perfect things.

Knight of Cups, un tren en la dirección contraria

La primera vez que vi Knight of Cups acababa de descubrir el cine de Terrence Malick. Yo apenas había visto películas por aquel entonces, pero como cinéfilo incipiente me interesaba todo tipo de cine, y en todo tipo de cine entraban básicamente las películas menos conocidas de mis actores favoritos. Song to song, que se había estrenado justo ese año, me había dejado totalmente descolocado: una película con una electricidad arrebatadora, hipnótica y totalmente diferente a cualquier cosa que yo hubiera visto hasta entonces.

Master of none, la serie que aprendió a volar

La llegada de Netflix a España, y a gran parte del mundo, trajo consigo una batería de series de calidad variable pero estética similar: un look limpio, fácil de ver y que daba pie al binge-watching que ha caracterizado a la plataforma. Este lanzamiento también los llevó a buscar autores que lanzasen sus propias series o películas a través de la plataforma; destaca el caso de David Fincher, con esa House of Cards que acabó hundiéndose. Pero, dentro de las múltiples comedias destacables que salieron de Netflix, mi favorita es quizá la menos llamativa: Master of none.

Dos amantes en silencio

La primera sesión del Ciclo de Cine Surrealista de Cineforuma… me ha pillado totalmente por sorpresa. Iba un poco sobre aviso: sabía que íbamos a ver una película estonia, en blanco y negro y enraizada en el folklore de un país con el que definitivamente no estoy nada familiarizado. Sin embargo, no estaba preparado para la riqueza temática y narrativa que November, de Rainer Sarnet, lanzó a la cara de los valientes que nos juntamos el pasado jueves.